Qué rico y delicioso un bizcocho para desayunar o merendar, con leche o chocolate, incluso solo con un poco de sirope. Ideal para cuando tienes invitados en la merienda o cuando los niños llevan a sus amigos a casa para estudiar o jugar.
Lo bueno que tienen los bizcochos de yogur es que éste lo puedes escoger de algún sabor para darle un toque distinto.
En este caso, elegí un yogur de fresa que le da un sabor sensacional y que no empalaga porque el toque de fresa es muy sutil.
Ingredientes
.1 yogur de fresa
.Azúcar (2 vaso de yogur)
.Aceite de girasol (1 vaso de yogur)
.3 huevos
.Harina (2 vasos de yogur)
.Maizena (1 vaso de yogur)
.1 cucharada de levadura
Poner el horno a calentar a 170º.
En un bol grande poner el yogur, el azúcar y el aceite de girasol, mezclar muy bien con unas varillas.
Añadir a la mezcla los huevos, mezclar de nuevo hasta que los huevos estén bien integrados en la mezcla.
Incorporar la harina, la maizena y la levadura. Mezclar todo durante un par de minutos para que quede una mezcla compacta.
Engrasar el molde donde se vaya a hacer el bizcocho, con un un poco de mantequilla, y espolvorear un pelín de harina. Verter la mezcla sobre el molde y meter al horno. El tiempo de cocción dependerá del tipo de horno, pero estará entre los 40-50 minutos aproximadamente.
Para comprobar que está hecho, pincharlo y si el cuchillo sale limpio ya está.
*Si no tenéis maizena, poner directamente 3 vasos de yogur de harina. Yo he puesto uno de maizena porque así el bizcocho queda mucho más esponjoso.