La combinación entre pollo y champiñones es perfecta y con ella se puede hacer multitud de recetas deliciosas y sencillas, tanto para días entre semana como para quedar de lujo ante tus invitados un fin de semana.

En esta ocasión con una salsita súper rica que hace que el pollo quede mucho más jugoso y, para que nos vamos a engañar, para hacer eso que tanto nos gusta a los españoles, mojar pan en la salsa.

Ingredientes para 2 personas:

.4 contramuslos (podéis utilizar muslos, cuartos traseros, pechugas,…)

.300 gramos de champiñones

.1 diente de ajo

.1 cebolla pequeña

.1 puerro pequeño

.Vino blanco

.1 vaso de caldo de verduras

.Harina

.Pimienta molida

.Sal

Aceite de oliva

.Patatas fritas

Elaboración

Salpimentar y enharinar las piezas de pollo.

En una cacerola, poner un chorrito de aceite de oliva y dorar las piezas de pollo durante unos segundos para sellarlas. Reservar.

Pelar el diente de ajo y la cebolla. Limpiar el puerro. Picarlo todo y ponerlo a pochar en la misma sartén donde habíamos sellado el pollo con un poco de sal.

Limpiar y trocear los champiñones. Cuando el puerro y la cebolla estén a medio hacer, incorporar los champiñones.

Cuando los champiñones comiencen a estar tiernos y el puerro esté pochadito, añadir una cucharadita de harina y mezclar bien para que se tueste. Añadir un buen chorro de vino blanco y dejar que evapore el alcohol.

Incorporar las piezas de pollo y el caldo de verduras. Dejar cocer  a fuego medio unos 30 minutos o hasta que el caldo haya reducido y quede una salsita.

Y para que el plato esté para chuparse los dedos, acompañarlo con unas patatas fritas.