Este bizcocho es sensacional y con tan sólo tres ingredientes. Es muy muy esponjoso e ideal para tomarlo con leche, café o chocolate, eso sí, absorbe mucho líquido.
Pero además es un bizcocho que suele utilizarse como base de tartas y también para los brazos de gitano.
Una receta que, además de deliciosa, sirve para multitud de variedades en la repostería.
Ingredientes:
.4 huevos
.150 gramos de harina
.150 gramos de azúcar
Separar las claras de las yemas y colocar, ambas, en boles grandes.
Batir las claras hasta dejarlas en punto de nieve. Cuando estén listas, incorporar 120 gramos de azúcar y mezclar bien manteniendo el volumen de las claras.
Por otro lado, añadir 30 gramos de azúcar a las yemas y batir hasta que blanqueé. En mi caso se quedó en color amarillento porque los huevos eran de corral y las yemas tenían un color más intenso del habitual.
Mezclar todo (primero las yemas con las claras y luego añadir la harina) con cuidado para intentar que las claras no bajen mucho su volumen.
Untar un molde con mantequilla y después de harina. Verter la mezcla y meter al horno, previamente calentado, a 160º durante 30-40 minutos.
Y listo para disfrutar y mojar en un chocolate calentito.